Muchas cosas se podrán rescatar del trabajo realizado en 2010, pero este último encuentro frente al País Vasco puede servir mejor para recordar lo que todavía queda por corregir y afinar para los grandes retos que presenta el año que va a comenzar.
La derrota 3-1 frente a País Vasco no fue un resultado sorpresivo ni es motivo de congoja. La forma en la que se dio, quizás sí. Dani Hernández fue la luz dentro del oscuro desempeño vinotinto en la “Catedral”, un San Mamés repleto de aficionados y entusiasmo, que se quedó con ganas de ver a un rival que exigiera más. Los vascos se conformaron con utilizar su mejor arma, el juego aéreo, para amedrentar constantemente a una Venezuela que aguantó todo lo que pudo, gracias al trabajo de Hernández bajo los tres palos, al desatino de los atacantes locales y al esfuerzo conjunto de la defensa y los volantes venezolanos.
Los primeros minutos, en los que la selección mostró ímpetu y ganas de ser protagonista, fueron un espejismo. La doble línea de cuatro con dos atacantes, esquema anticipado por el seleccionador César Farías para esta oportunidad, se concentró temprano en repeler ataques y acumular hombres cerca del arco. Evelio Hernández fue utilizado como un mediocentro de salida, al lado de Giácomo Di Giorgi, pero la realidad es que se vio forzado a pasar la mayor parte del encuentro al borde del área.
De cinco posibles debutantes, tres lograron estrenarse con la Vinotinto, aunque por no tratarse de un encuentro oficial (País Vasco no es una selección FIFA), su ingreso a la lista histórica tendrá que esperar.
Mario Rondón, legionario establecido en Portugal, fue uno de ellos y comenzó en el once titular. Pocos balones tuvo el delantero en 59 minutos para mostrar su valía, por lo que necesitará un nuevo llamado para despejar incógnitas. Los juveniles Carlos Rivero y Daniel Febles completaron el trío debutante con minutos al final del choque, mientras que César Castro y John Chancellor se quedaron con las ganas.
Ardua labor. Oswaldo Vizcarrondo, con un gol en jugada de táctica fija, le dio un respiro necesario a la selección nacional en el primer tiempo. El central había manifestado su malestar por las críticas hacia su trabajo y el de sus colegas defensas, pero este partido no ayudó para disipar dudas. El colectivo perjudicó el trabajo de la zaga, pues Venezuela no pudo cortar balones ni retenerlos con propiedad para minimizar la posesión de pelota de los vascos.
A pesar de aguantar con más bríos que precisión, la valla cayó en el 55, con un desvío que descolocó al portero, y luego llegarían dos goles más para cerrar la caída sin atenuantes. Queda la experiencia, el fogueo para varios jugadores que atendieron el llamado para suplir las bajas de importancia y la necesidad de mejorar para rendir en el momento en el que estos goles y los puntos sí contarán en 2011. El descanso será breve. El 8 de enero, en San José contra Costa Rica, empezará un nuevo e interesante año vinotinto.
Ficha técnica:
País Vasco (3): Iraizoz; (Riesgo, m.46); Oier, Ansotegi (Labaka, m.46), Amorebieta (M.González, m.46), Sirieix (Koikili, m.46); Gurpegi (Xabi Alonso, m.60), Aranburu (Javi Martínez, m.46); Prieto (Susaeta, m.46), Zurutuza (Toquero, m.46), Gabilondo (Muniaín, m.46); y Llorente (Agirretxe, m.46). DT: José Ángel Iribar y Mikel Etxarri.
Venezuela (1): D.Hernández; Romero (Rivero, m.72), Vizcarrondo, Perozo, Fuenmayor (Granados, m.60); Di Giorgi, E.Hernández (F.Flores, m.67); Guerra (Febles, m.83), Orozco (Gómez, m.46; A.Flores, m.90+3); Rondón (Chourio, m.59) y Arismendi (Del Valle, m.67). DT: César Farías.
Goles: 0-1, m.32, Vizcarrondo (V) –remate de derecha en el primer palo, tras centro de Hernández en tiro libre-; 1-1, m.55, Gurpegi (PV) –tiro fuera del área que se desvía en Vizcarrondo-; 2-1, m.70, Labaka (PV) –córner, cabezazo hacia atrás y remate corto y rasante-; 3-1, m.86, Munían (PV) – recogió mal pase de Flores para encarar y batir al portero-.
Amonestados: Oier, Koikili (PV); E.Hernández (V).
Árbitro: Iturralde González (C.Vasco).
Estadio: San Mamés, Bilbao.
(Nota escrita para la edición 30/12 de El Nacional)
(Nota escrita para la edición 30/12 de El Nacional)