martes, 30 de octubre de 2012

Frenar a Messi, parte II


Una idea clara, confianza y mucha fe. Para frenar a Lionel Messi, era necesario. Para hacer ver a Argentina como un enemigo disminuido, fue obligatorio.
Ha pasado un año desde que Venezuela derrotó por primera vez en su historia a la albiceleste. Y ahora, a la Vinotinto le toca pensar en repetir esa hazaña en marzo del próximo año. Ese es el siguiente reto en la eliminatoria, uno que ahora presenta condiciones diferentes más allá de realizarse en suelo rival y no en Puerto La Cruz.

Aquel partido dejó huella en ambos bandos. En Venezuela dejó la seguridad de poder llegar al Mundial por la única vía que se estima posible: derrotando a los grandes. Y dejó también un camino para conseguirlo. Ya no parece imposible detener a Messi y compañía.
"Había concentración plena en el grupo y convencimiento de que podíamos hacerlo", explicó hace un año Franklin Lucena, cuando detalló cómo lograron frenar a Messi, en una amena charla en el Cocodrilos Sports Park, lugar en el que se repite la conversación ahora, 12 meses después.
"Debíamos presionarlo cuando tuviera la pelota, no dejarlo que se volteara, Caíamos dos o tres para rodearlo. Pero no había marca personal", explicó. La clave era una marca alternada e incluso escalonada: "Dependiendo de la zona en la que cayera podía marcarlo Tomás (Rincón) o yo. Y cuando se movió a la raya, lo marcó Gabriel (Cichero). Si Gabriel subía, entonces me tocaba a mí cubrirle la espalda", afirmó.

El Premundial no da tregua y Lucena vuelve a pensar en aquel partido. Habrá que intentar repetirlo y el volante está consciente de las circunstancias diferentes, pero entiende qué necesitan que coincida para salir airosos.
"Son totalmente distintos los partidos. Aquella vez nosotros veníamos de perder con Ecuador, se dividió al grupo y aquí en casa se quedó un equipo más maduro. Con las ganas, trabajo y mucha actitud sacamos un partido positivo a un rival al que nunca le habíamos ganado", expresó Lucena, a sabiendas de que esta vez un empate también tendrá sabor a victoria.
"Debemos sumar sí o sí. Ya perdimos puntos en casa con Chile y Ecuador, y para ir al Mundial hay que hacerlo. Vamos a buscar todos los puntos que podamos sacar, porque cuando perdimos en casa con los chilenos fuimos entonces a Paraguay y logramos un triunfo. Pero claro, un punto en Argentina, ¿a quién no le va a gustar?".

En otro momento. "En aquel triunfo, Argentina venía reagrupándose porque era el comienzo de la eliminatoria y les afectó el calor de Puerto La Cruz, mientras que nosotros estábamos frescos, pero para este partido van a llegar muy bien, es una de las mejores selecciones del mundo. Sin embargo, nosotros también vamos a llegar bien y debemos seguir con la misma mentalidad de sacar puntos fuera de casa", dijo Lucena.
El volante le ha seguido los pasos al contrincante y está convencido de que esta versión de la albiceleste será mejor. No en vano son líderes de la eliminatoria, a pesar de un gris inicio. Por eso deberán volver a adaptarse al reto.

"Va a ser difícil porque Argentina viene mejorando en su juego, en su casa le han metido 3 y 4 goles a los demás. Sabemos que es complicado contrarrestar sus virtudes y no nos podemos confiar en lo que ya hicimos. Debemos prepararnos fuerte e ir bien concentrados. A estos partidos hay que llegar con humildad y trabajar como obreros", afirmó.
"Argentina es una motivación extra, tienen a varios de los mejores jugadores del mundo. Y ves sus partidos y sabes que son difíciles. Uruguay y Chile van y salen goleados de allá. Son impresionantes, por más que quieras marcarle hombre a hombre son muy potentes en el uno contra uno. Para evitar eso hay que estar muy ordenados, concentrados y no cometer errores porque te los hacen pagar caros", explicó.

Con la ayuda de Rincón. Tomás Rincón fue una pieza clave para contener a Argentina y su retorno será una oportuna buena noticia. El jugador del Hamburgo es vital para el funcionamiento de la Vinotinto y podría regresar a la eliminatoria precisamente en ese partido contra los sureños, luego de una larga recuperación. Su ayuda será bienvenida, como admitió su usual socio en la primera línea de volantes.
"Sí, claro. Todos conocemos la capacidad de Tomás, lo importante que es para nuestro once titular. Pero igual sabemos que no podemos depender de un solo jugador. La marca a Messi fue una labor colectiva, así que debemos volver a pensar así. El trabajo de todos es lo que nos permitirá sacar ese resultado".

Messi, otra vez. Si Argentina ha crecido en la eliminatoria, lo ha hecho también porque Messi ha sido el principal ejemplo. La estrella del Barcelona ya es el colíder goleador del Premundial suramericano con 7 tantos.
"Messi es uno de los mejores del mundo, quizás el mejor, pero para contrarrestarlo debemos seguir pensando de la manera en la que lo hicimos en Puerto La Cruz". Y como si fuera un mantra, lo repite, un año después: "Lo marca Tomás o yo, y si se va a un lado, lo agarra el lateral".

No hay por qué negarlo o minimizarlo: para frenar a Argentina, hay que frenar a Messi. "Por su desequilibrio es una complicación, pero la ventaja es que ya lo conocemos. Hay que volver a trabajar en eso, con carácter. Lo pudimos hacer una vez, y aunque él y Argentina han mejorado, claro que podemos repetir ese trabajo". En marzo, al menos eso no habrá cambiado. Una idea clara, confianza y mucha fe.