Jesús Gómez es el último de un grupo de buenos amigos que salió del Caracas: “Nos hemos ido separando, pero igual mantenemos contacto. Caracas significó mucho para mí, es como si hubiera jugado ahí toda la vida. Extrañaré también a la barra”.
Su nuevo destino, como se había adelantado, es Egipto. El equipo será Wadi Degla, un conjunto joven que se está reforzando. Este adiós era esperado, pero no deja de representar un golpe duro para la nómina roja en este momento.
“El contacto lo tenía desde hace más de un mes, o sea que en nada tiene que ver con los últimos movimientos del Caracas. Es un paso importante para mí y estoy muy contento, porque voy a la liga más fuerte de todos los países árabes”, dijo.
Para la “Pulga” no se trató solo de dinero, a pesar de ser una oferta económica muy superior a lo que ofrecían desde Argentina: “De Dubai e Indonesia tenía propuestas millonarias, pero en esta decisión pesó mucho lo deportivo, el nivel de la liga, la posibilidad de ir a torneos internacionales”.
Cuando estuvo en Marruecos y Siria, Gómez perdió oportunidades de jugar con la Vinotinto. Ahora, quiso enmendar eso: “La selección pesó en mi decisión. De hecho, lo hablé con el cuerpo técnico y ellos vieron con buenos ojos esta firma. Cuando fueron al Mundial Sub 20 (en 2009) vieron partidos y conocieron los estadios. Espero me sigan tomando en cuenta".
(Nota escrita para la edición 14/12 de El Nacional)
