lunes, 28 de febrero de 2011

Juan Pablo Añor: "La familia está contenta"


La familia Añor, futbolera por excelencia, está disfrutando con las sorpresas que le ha traído este 2011. Bernardo Añor, hijo del gran futbolista del mismo nombre, fue firmado por el Crew de Columbus en la MLS estadounidense, el circuito en el que se desempeñan otras figuras vinotinto como Emilio Rentería (también en Columbus) y Alejandro Moreno (Chivas USA).
Aunada a esa alegría está la convocatoria a la selección Sub 17 de un miembro menor de la dinastía, Juan Pablo, quien juega en las divisiones juveniles del Málaga en España. El jovencito sueña ahora con la clasificación al Mundial de la categoría, que disputarán en el Suramericano de Ecuador a partir del 12 de marzo.
“Ojalá nos vaya bien en el Suramericano, hagamos un buen papel y clasifiquemos. Si es así, ¿qué más podemos pedir este año? Mi hermano ahora juega como profesional en la MLS y yo estoy escalando”, dijo “Juanpi” con entusiasmo.
Estamos todos orgullosos por Bernardo y le deseo todo lo mejor, es un ejemplo para la familia y para mí. Consiguió estar en una liga a la que van estrellas como David Beckham o Thierry Henry. Estoy muy orgulloso de mi hermano”, expresó.
El joven del Málaga llegó a Venezuela este fin de semana para incorporarse hoy a la concentración de la selección Sub 17 en Mérida, la última parada del grupo antes de viajar a Ibarra, sede del grupo B.
Antes de venir, aprovechó para dejar un recuerdo en su club: anotó dos goles. “Me fui con un partido en el que me fue muy bien y contento por el llamado de la Vinotinto. Es lo que quería y ya estaba dudando si iba a poder estar en el Suramericano, porque veía los módulos y la gira por Argentina y yo no estaba. No pude. Antes me habían convocado, pero con Málaga era difícil obtener el permiso. Pero me llamaron y estoy feliz. Voy a estar en Mérida”, afirmó.
Pero “Juanpi” no será un extraño en el grupo. El ex jugador de las categorías juveniles del Real Esppor y el Caracas, ya había practicado con la selección antes de emigrar en agosto pasado. “Antes de venir a Málaga estuve en el cuadrangular en Perú y me había entrenado con la selección, pero en la etapa de preparación de este Suramericano, este de Mérida será apenas mi primer módulo de trabajo”, contó.
Añor consiguió que Málaga lo cediera por el tiempo necesario: “Desde ya quedo concentrado con la selección hasta cuando acabe el campeonato, si clasificamos y llegamos lejos, ojalá. Apenas termine con Venezuela, me debo reportar otra vez en España”.

Buen heredero. Muchos recuerdan a Bernardo Añor padre, pero el jovencito no tuvo la fortuna de verlo jugar. “Mi hermano mayor sí lo llegó a ver, pero yo nunca pude. Igual cuando estuve en el Caracas y el Esppor, todo el mundo me habló de mi papá, me decían que ojalá fuera como él. Lástima que no lo vi”, dijo.
Al pedirle a Añor que se describiera como jugador, respondió: “Mis características son la técnica, el golpeo del balón y la visión de juego. No soy veloz por encima del promedio, así que mi fuerte son otras cualidades. En el Málaga juego como mediapunta o delantero más retrasado”.
Aunque solo tiene ocho meses en España, ya se le nota un acento marcado. “Y más que el acento, algunas palabras que uso. Es que si no, no me entienden acá”, confesó entre risas.
En lo futbolístico, ha aprendido más: “Juego con el equipo del primer año juvenil y a veces me convocan al de segundo año. He mejorado mucho, lo siento así y me lo han dicho. Es un fútbol más táctico y trabajo cada día para ver si puedo llegar arriba”.
Ahora, Añor llega para unirse a una Vinotinto en la que puede aportar muchas cosas y en la que conoce a la mayoría. “Del grupo que estuvo en Perú están casi todos. A los que más conozco son Alejandro González, que ahora está en España con el Deportivo La Coruña, y José Peraza, del Caracas. Es un buen equipo en general, muy fuerte y ha trabajado desde hace tiempo. Ojalá nos vaya bien”, aseguró ilusionado.

Con Salomón de anfitrión. En Málaga, Añor contó con un anfitrión de lujo: Salomón Rondón, la nueva estrella de la ciudad. “Cuando llegué, las dos primeras semanas, Salomón me llevaba con él a todos lados para conocer y adaptarme. Me dejaba su tarjeta VIP para ver sus encuentros en el estadio. Ahora, claro, tenemos menos contacto, pero igual lo vi justo ahora antes de viajar”, relató.
“Es un ejemplo. Un venezolano en el Málaga dice mucho, y ahora yo intento destacar en la cantera también".
(Nota escrita para la edición 28/2 de El Nacional)

domingo, 27 de febrero de 2011

La sacrificada vida de un buen DT


“Creo que he ido dos veces al cine en seis años”, confesó Eduardo Saragó, técnico del Petare. “Cuando llego a la casa, me desconecto para poder disfrutar con mi familia. Muchos me dirán que igual sigo pensando en fútbol, pero trato de no ligar las dos cosas”, dijo Noel Sanvicente, DT del Real Esppor.
Los dos entrenadores, amigos y hoy rivales en el estadio Brígido Iriarte, tienen varias cosas en común: son exitosos, están en la élite de su profesión en el país y son trabajadores a más no poder. Pero también hay una diferencia que es clave en la forma cómo llevan su vida paralela al fútbol. Saragó tiene 29 años de edad, es soltero y vela por sus padres. Sanvicente suma 46 años de edad, es casado y tiene un niño y una niña.
La exigente rutina de un estratega demanda la mayor parte de su tiempo, y el perfeccionismo de ambos en su trabajo los lleva a encontrar complicaciones a la hora de afrontar también otro reto: poder disfrutar de la vida fuera del campo de juego.

Obsesión con gusto. “Mi día típico puede empezar con la práctica a las 6, 7 u 8 de la mañana, dependiendo de donde sea la sesión. En La Guacamaya tenemos la oficina, y si es ahí, llegamos hora y media antes para revisar lo planificado para el día. Luego del entrenamiento, voy a la casa, almuerzo y me siento a trabajar, a revisar videos de nuestras prácticas o de los rivales que enfrentaremos. Luego salgo al entrenamiento de la tarde y después reviso lo que se hizo en el día o algún otro video, y en la noche toca descansar. Pero este trabajo no tiene horas, porque a las 9 de la noche todavía puedo estar haciendo alguna llamada por logística, viajes, hidratación, utilería. Es así”, detalló Saragó.
El joven técnico del Petare fue adiestrado por “Chita” Sanvicente en el Caracas, y por eso heredó algunas de sus costumbres. La que todavía intenta adoptar es cómo hacer tiempo para sí mismo.
“Vivo con mis padres, que son mayores, pero en la casa prácticamente no los veo. Cuando estoy allá me encierro a trabajar, o salgo muy temprano o llego muy tarde, y así paso tiempo sin verlos. Si no ganamos, a veces ando muy mal en casa. Lamentablemente, en ocasiones comparto muy poco. Y eso que mi papá ve mucho fútbol y va al estadio”, contó Saragó.
“Al trabajar en Caracas por lo menos los veo, porque cuando estuve en Zamora, veía a mis papás tres o cuatro veces al año nada más”, agregó.
“Llevo ocho años trabajando como entrenador y hasta hace dos años, creo que mi vida social era prácticamente nula. Un día no me pude parar de la cama, me dio un pico grave de estrés y entonces empecé a liberar algo de la tensión del trabajo. Salía a correr, al gimnasio, a tener algo de vida privada. Pero estuve tres o cuatro años sin ir a la playa en un momento. No tenía vacaciones. Hace tres meses me diagnosticaron dos úlceras, también por estrés”, dijo.
Saragó admite que estas limitaciones también se deben a su forma de ser. “Durante casi dos años tuve una rutina en la que trabajaba con el Caracas con “Chita” en la mañana, desde el mediodía en un colegio y al final de la tarde con los equipos Sub 17 y Sub 20 del Centro Italo. Puede que esté obsesionado y que no esté bien esa manera de ser. Tampoco garantiza que todo salga bien”, admitió.
“Conozco entrenadores que llegan a partir del entrenamiento del miércoles, otros que no van a las sesiones de trabajo físicos, e igual son exitosos y ganan campeonatos. Y está bien, porque esa es su forma de trabajar. Pero a mí me cuesta, no puedo. Hay equipos en los que algún directivo se molesta si uno no los acompaña a una reunión o a un almuerzo, pero yo no puedo dejar de ir a un entrenamiento”, dijo.
La lección, sin embargo, ha sido aprendida debido a los riesgos en su salud: “Por los problemas de estrés que he tenido, ahora busco más tiempo para mí, porque a veces dudo si vale la pena afectar tu salud. Trato de recuperar una vida más normal, porque a veces lo vives en demasía y te desgastas. Pero en general no me quejo de lo que hago, soy feliz así y trabajo por mi familia”.

Papá y entrenador. Para Sanvicente, la obligación de hacer un espacio en su agenda es mayor, porque debe velar por su esposa y sus dos hijos.
“En un día regular llego a preparar el entrenamiento a las 5 de la mañana, después voy a la oficina (también ubicada en La Guacamaya) para chequear detalles y ver videos. Me voy a las 10:30 a mi casa para almorzar y vengo otra vez al mediodía a ver a la Sub 20 y a los juveniles. Cuando termino, paso por Cumbres y por Directv Sports Park, que es donde juegan las categorías infantiles y básicas. Ahí superviso y trato de motivar. Y en la noche, a la casa de nuevo”, contó.
“Chita” admitió que la experiencia le ha enseñado fórmulas para sobrellevar la labor: “Yo delego trabajo, por eso me he rodeado de personas capacitadas y cada cual sabe lo que tiene que hacer. Hay un coordinador que es mis ojos en las inferiores. Uno supervisa y está pendiente de que todo salga bien, porque yo quiero dejar una huella, aportar a la institución, pero con gente así se facilita el trabajo del técnico”.
Conoce bien a Saragó y por eso comentó las diferencias de sus casos: “Saragó es más joven, es soltero, y quizás cuando se case y tenga hijos va a ir cambiando. Ahora quiere vivir no 24, sino 26 horas de fútbol al día, pero uno debe buscar tener su vida propia porque si no esto te va consumiendo, te desgasta. El tiempo y la experiencia te dan eso. Como jugador y como técnico, siempre he puesto a mi familia primero, porque es tu apoyo y debes darles tiempo para compartir. Cuando puedo llevarme al niño lo hago, hay que buscar ese huequito en la agenda”.
El entrenador del Real Esppor no deja de dar indicaciones en el campo y fuera de él, pero en su hogar cambia el enfoque: “Me gusta la privacidad. Cuando estoy en casa, cierro la computadora, me olvido del fútbol y me pongo a ver una película, la novela o a echar broma con los niños. Y listo”.
Su pasión por el deporte, sin embargo, lo lleva a disfrutar ahora otra etapa con su hijo Noel Alejandro, de 6 años de edad, quien hizo el mismo cambio de su padre: pasó del Caracas al Real Esppor. “A las prácticas lo llevo y lo busco, él quiere hacer todo en esto del fútbol. Los viernes es difícil poder ir a verlo en los partidos porque trabajamos en doble turno, pero cuando voy, no le digo nada y lo sorprendo. Se pone contentísimo. Y no estoy en las gradas como entrenador, sino como representante. Me quedo callado y no grito. De hecho, a mi esposa la controlo en eso”, relató.
Compartir el fútbol con su hijo renueva sus ánimos. “Pero si no llega a ser futbolista, quiero que sea un buen estudiante, un buen padre. Eso le debe enseñar uno y luego que él escoja lo que quiera ser. En el fútbol es volante, goleador. Balón que ve, lo patea al arco. Es zurdo, no sé de dónde salió eso, pero es cariñoso y eso lo sacó del papá. Mucha gente me ve como una persona dura, por mi disciplina, pero el que me conoce sabe que soy un pan de guayaba”, finalizó entre risas.

Otra forma de ver el fútbol
Saragó y Sanvicente confiesan que el simple gozo de ver un partido de fútbol, no lo tienen ellos. “Esa es la diferencia entre fanático y técnico, yo siempre lo voy a ver de otra manera. Uno busca detalles, ver qué se puede mejorar”, aseguró “Chita”.
Para Saragó, ir al estadio o ver televisión es una tarea: “Cuando era chamo me gustaba el fútbol europeo, veía la liga italiana y simpatizaba con el Real Madrid. Pero al ser entrenador le pierdes el gusto a eso, porque incluso el equipo que seguías, si no compartes la idea futbolística del técnico, ya no te gusta. Hoy no importa cuál partido europeo pasen, si hay un Trujillanos-Yaracuyanos, voy a ver ése. Pero lo veo como trabajo, para analizar a un posible rival. Y cuando puedo ir al estadio, es igual”.
(Nota escrita para la edición 27/2 de El Nacional)

Mario Rondón: "“Este año se está convirtiendo en el mejor de mi carrera"


Mario Rondón sumó ayer su quinto gol en la liga de Portugal y su octavo en todas las competiciones para darle la victoria 2-0 al Pazos de Ferreira sobre Vitoria Setubal.
El delantero venezolano marcó al minuto 23 y encaminó el resultado, pero debió salir sustituido en el entretiempo. “Venía con molestias en un tobillo y me dieron un golpe. No es nada grave, pero me cambiaron por precaución, porque esta semana jugaremos la semifinales de la Copa de la Liga”, explicó Rondón desde Portugal.
“Estoy contento por el gol, porque es importante para mí y para mi equipo. Este 2011 se está convirtiendo en el mejor año de mi carrera porque estoy jugando y anotando con regularidad. Las cosas están saliendo bien y espero que sigan así”, dijo.
(Nota escrita para la edición 27/2 de El Nacional)

sábado, 26 de febrero de 2011

Yohandry Orozco: "Fue bonito vivir esto"


Yohandry Orozco disfrutó de varios de los momentos con los que soñaba en su primera convocatoria. El zuliano dijo que quería celebrar con una victoria, que conversaría con Juan Arango en este enfrentamiento entre sus clubes y que esperaba poder debutar en la Bundesliga con el Wolfsburgo.
Lamentablemente, de esa lista tuvo que tachar el último y más importante hecho, su estreno en el campo, pues su técnico Pierre Littbarski no se arriesgó a hacer el cambio en una segunda mitad que se le complicó a más no poder hasta el último segundo, después de haber tomado una ventaja 2-0 en el primer tiempo, con dos tantos del brasileño Diego. Un penal anotado por Filip Daems al minuto 74 enredó el encuentro para el conjunto local que al final venció 2-1.
Pero al menos Orozco pudo compartir con su amigo Arango, titular nuevamente en el Borussia Mönchengladbach, el rival de turno del Wolfsburgo. “Rumbo a los camerinos conversamos y hablamos muchas cosas, fue bueno verlo. Ya al terminar el juego, intercambiamos camisetas y nos quedamos un rato en el estadio charlando. Me dijo que no me preocupara, que tendría mis oportunidades, y que las aprovechara cuando llegaran”, contó Orozco, vía telefónica.
El joven de 19 años de edad se mostró contento y agradecido por la experiencia: “Estoy muy contento por el trabajo del equipo, son tres puntos necesarios. Se jugó un buen partido y al final fue muy bonito poder celebrar la victoria, me gustó poder vivir eso”.
Orozco también compartió con su padre, Sadys Orozco: “Me dijo que estuviera tranquilo. Y lo estoy, sé que debo tener paciencia. La oportunidad de mi debut llegará”.

Buena charla entre criollos. Yohandry Orozco y Juan Arango dejaron la imagen del partido para Venezuela al encontrarse al finalizar el primer tiempo y caminar juntos a los vestuarios, mientras conversaron con agrado y las cámaras de televisión los seguían en sus movimientos. Igual charlaron en el estadio al terminar el encuentro. “Ya después si cada cual se fue por su lado, él tenía que viajar a su casa”, relató el zuliano, que confesó que uno de los mejores momentos fue poder unirse a sus compañeros en la celebración frente al público al final.
(Nota escrita para la edición 26/2 de El Nacional)

Ronald Vargas: "En dos semanas me quitan las muletas"


Ronald Vargas cumplió ayer con su primer chequeo médico de control, después de la intervención quirúrgica en su rodilla izquierda, y salió de la consulta con gran entusiasmo por su recuperación.
“El doctor me encontró muy bien, tanto que me dijo que en dos semanas más nos volveremos a ver y me quitará las muletas. Entonces me dará el programa y los ejercicios que podré hacer por mi cuenta”, informó desde Bélgica el volante del Brujas, que espera estar de regreso a la acción en seis meses. “Este programa de trabajo lo realizaría en el club o con un entrenador personal en su gimnasio”, explicó.
(Nota escrita para la edición 26/2 de El Nacional)

viernes, 25 de febrero de 2011

Yohandry Orozco: "Espero poder debutar y además contra el equipo de Juan Arango"


Yohandry Orozco recibió ayer una gran noticia. Después de ver tres encuentros del Wolfsburgo sin estar en la convocatoria, obtuvo su primer llamado. “Tenía el presentimiento de que me iban a convocar. Tuve paciencia y finalmente se dio”, dijo vía telefónica desde Alemania.
Un día antes, el zuliano había confesado que estaba desesperado por jugar. Hoy, tendrá la oportunidad de hacerlo, nada menos que contra Borussia Mönchengladbach, el equipo en el que se desempeña Juan Arango.
Orozco exclamó feliz: “Ahora, con el favor de Dios, podré debutar y además se podría dar contra el equipo de Juan”. El volante confirmó que le notificó a su amigo: “Ya le avisé, le dije que me convocaron y que hablaremos antes del partido”.
Hace dos semanas, Miku y Salomón Rondón se enfrentaron en España e intercambiaron camisetas al final del juego. “Sí, yo haré lo mismo con Juan si juego”, confesó.
El zuliano confirmó que estará en el banco y que fue empleado en las prácticas como volante y no como lateral izquierdo, como hace un tiempo lo probaron.
El zurdo pudo compartir su felicidad con su padre, Sadys Orozco: “Me informaron del llamado después de la práctica, y mi papá estaba en el estadio, así que ya lo sabe. Pero no celebraré aún, esperaré a que pueda debutar. Y que ganemos, claro".
(Nota escrita para la edición 25/2 de El Nacional)

Giancarlo Perluzzo dijo que hizo lo correcto, pero Bernardo Corujo criticó su labor

Los 16 minutos de tiempo agregado que dio el árbitro Giancarlo Perluzzo en el empate 1-1 entre Petare y Aragua se convirtieron en el nuevo argumento para quienes alegan que la crisis del arbitraje en Venezuela ha tocado fondo.
Un penal sentenciado por una falta fuera del área y dos expulsiones, la última de las cuales forzó al volante Miguel Mea Vitali a cubrir el arco aragüeño, fueron parte de los sucesos de esos increíbles 16 minutos adicionales que terminaron de sorprender a todos.
Bernardo Corujo, presidente de la Comisión de Árbitros de la FVF, siempre ha defendido a sus colegas, pero ante este caso expresó su disconformidad: “Estoy muy sorprendido, 16 minutos de tiempo agregado es un exabrupto, la única manera de que eso pueda darse en un partido de fútbol es que suceda algo extra deportivo, y tengo entendido que ese no fue el caso en ningún momento”.
Corujo explicó: “Para dar tanto tiempo tendría que haberse desprendido el travesaño o que se haya roto un banderín y se deba reemplazar. En esos casos o en un apagón, se justifica, pero ese no fue el problema porque incluso hablé con el inspector del partido y alegó que no hubo razones para tamaña tontería”.
En la polémica jugada del penal, sin embargo, Corujo no castigó a Perluzzo: “Hay reclamos sobre esa jugada y en el video que observé me pareció que la falta fue sobre la raya y eso sí podría sentenciarse como penal. Pero debo ver con tranquilidad la jugada luego y revisar el informe del partido. Ahora, esos 16 minutos de reposición son algo que no puedo apoyar, no es correcto de ninguna manera”.
Agregó: “A Giancarlo lo venimos trabajando, queríamos darle oportunidades porque necesitamos renovación, pero no sé qué le pasó”.

La versión del árbitro. Giancarlo Perluzzo atendió la llamada y respondió de forma escueta sobre su polémica decisión de extender el encuentro: “Esas son cosas de nuestro trabajo”.
No se le permite discutir públicamente el caso, como es costumbre, pero al preguntarle si sostenía que fue correcto dar tanto tiempo adicional, dijo: “Sí, hice lo correcto”.
Reiteró que no podía agregar mucho más a su versión para defenderse de las críticas y finalizó: “Lamentablemente, no puedo comentar lo sucedido dentro del campo”.

Problema general. Si en algo coincidieron los técnicos de Petare y Aragua fue en que los fallos arbitrales son comunes en la liga y han afectado a todos en un momento determinado.
“En Maracaibo me pasó hace una semana, hicimos un gol claro y no lo validaron. Y el juez de línea luego admitió su error. Cuando contra Caracas nos dieron un penal que no fue, yo lo admití. Pero este sí fue penal”, dijo Eduardo Saragó, estratega del Petare.
“Como los beneficiados, entre comillas, somos nosotros, cualquier opinión que yo ofrezca va a sonar parcializada, pero el gol que anotamos fue al minuto 90+1, no fue al 10 o al 15 de descuento, y el árbitro siempre explicó al Aragua las razones por las que agregaba minutos. Los jugadores del Aragua, de hecho, tuvieron un buen comportamiento para ese momento de desesperación, aunque claro, estaban molestos”, afirmó.
Si no se toman medidas para ayudar a los árbitros y mejorar su labor, esta no será la última gran controversia.

Últimos minutos de tensión. Desde el 90+9, Miguel Mea Vitali pasó los últimos siete minutos del encuentro bajo el arco, esperando que no le tocara la desgracia de recibir el gol de la derrota. Hasta sudó con un tiro libre de Evelio Hernández que pasó alto. Como mediocampista, su experiencia con los guantes era limitada. “Me tocó hacer esto una vez con el Unión Atlético Maracaibo, esta es la segunda vez. Uno está preparado para todo”, dijo el capitán del Aragua, quien reclamó con fuerza la actuación arbitral.
“Expulsar al portero con doble amarilla (por retrasar el partido) es algo poco visto. Lo vi una vez en la Copa América con Candelario (Andarcia, venezolano) y ahora lo repite el señor Perluzzo”, afirmó.
Después de sufrir como pocos en el encuentro, el técnico Raúl Cavalleri prefirió calmarse en el camerino y luego salir a declarar sobre lo sucedido: “Es un bochorno. Hicimos las cosas mejor que Petare. Pero esto no pasa solo acá, esta sucediendo muy seguido en todas las canchas. Hay muchos árbitros honestos y buenos, pero esto que se mostró aquí fue lamentable".
(Nota escrita para la edición 25/2 de El Nacional)

jueves, 24 de febrero de 2011

Yohandry Orozco: "Debo tener paciencia para jugar"


“Me la paso con los brasileños porque hablan español. Voy pegado a todos lados con ellos”, admitió Yohandry Orozco. Al volante no le importa mucho no saber pedir comida en alemán, estar en un hotel o ser “adoptado” por el cuarteto brasileño del Wolfsburgo. Pero sí le importa no poder entrar al campo todavía.
“Desde hace rato quiero entrar, estoy desesperado por jugar. Pero sé que debo tener paciencia, seguir trabajando y esperar el momento preciso”, dijo el volante ofensivo, vía telefónica.
Orozco llegó a Alemania hace tres semanas como uno de los cinco fichajes de invierno del Wolfsburgo y ha sido el único que no ha podido estrenarse, pues aún espera con ansias su primera convocatoria.
“Me toca esperar. Justo hoy (ayer) habló conmigo el asistente técnico del equipo y me dijo que estuviera tranquilo, que contaban conmigo y que no me apurara”, contó el marabino.
A sus 19 años de edad, es comprensible que su entusiasmo le gane a la paciencia. Mientras tanto, trata de sacarle el mayor provecho a las prácticas. “Ya me estoy adaptando a la forma de trabajar de los alemanes y a su estilo de juego, que es pa’lante. Físicamente estoy muy bien y eso ayuda”, dijo.
Explicó que en las prácticas lo han usado como mediocampista en varias posiciones, y que hasta lo han probado como lateral. “Me probaron como lateral izquierdo. No es mi puesto, pero uno intenta adaptarse a eso para poder jugar”, explicó.

Nueva vida. La baja temperatura en Alemania ha sido una prueba para el zuliano. “Hay mucho frío, pero ya me he ido acostumbrando. Mi papá no”, dijo con humor el joven, que está acompañado desde la primera semana del mes por Sadys Orozco, su padre.
Con sus colegas venezolanos mantiene contacto: “Tomás Rincón (Hamburgo) me visitó cuando llegué, estuvo aquí en el hotel. Y a Juan Arango (Gladbach) lo llamé y hablamos, y desde entonces nos mandamos mensajes de vez en cuando”.
Desde que llegó, vive en un hotel, pero pronto se mudará. “La semana que viene me deben dar la casa y podré instalarme. Lo que pasa es que no habían conseguido una hasta ahora”, indicó.
Poco a poco, Orozco trata de integrarse a su nuevo ambiente: “Voy siempre a los mismos lugares, el centro de la ciudad y un centro comercial”. Sus amigos son los brasileños del club. “A Diego lo veía jugar en la televisión, es una gran figura, y también conocía a Josué y Grafite. A Cicero no, no sabía donde jugaba y lo vine a conocer aquí”, contó.
El idioma lo estudia con dedicación: “Todos los días tengo clases de alemán en el estadio. A la una de la tarde estudio y a las tres empieza la práctica. Todavía no sé pedir una comida, pero sí doy los saludos y los buenos días”, confesó entre risas.
Pronto espera poder decir: “Yo debuté en la Bundesliga".
(Nota escrita para la edición 24/2 de El Nacional)

El partido interminable

“¡Ladrón! ¿Qué más le voy a decir?”, exclamó a gritos el técnico del Aragua, Raúl Cavalleri, al salir del campo tras el empate 1-1 de su equipo con Petare.
Su furia iba dirigida al árbitro Giancarlo Perluzzo, no por algo que haya sucedido en los 90 minutos para olvidar que tuvo el partido, sino por los 16 que decidió dar como tiempo agregado.
Leyó bien, 16 minutos. Ese tiempo adicional quedará en la memoria por lo inverosímil de la situación que se vivió en la parte baja del estadio Olímpico y la controversia que causó, pues pasó a ser una prueba más de la crisis arbitral que hay en Venezuela.
Petare había deslucido en este encuentro y un error defensivo le dio a Alexander Rondón la oportunidad de conseguir la ventaja 1-0 en el segundo tiempo al Aragua, que se permitió el lujo de desperdiciar algunos goles más en la recta final del choque. Bueno, final para un encuentro normal, aunque apenas el inicio para este extraño partido. Porque fue a partir del 90 cuando empezó el verdadero sufrimiento para el cuadro visitante.
El primer indicio de que no sería un cierre normal de encuentro fue el anuncio de 5 minutos adicionales que dio el cuarto árbitro, en una segunda parte que nunca justificó tal compensación. La banca del Aragua reclamó y apenas unos segundos después, tras una queja del Petare, salió un nuevo cartel con 6 minutos de reposición.
Cavalleri y sus pupilos estallaron. Nunca sospecharon que necesitarían más energías para lo que vendría. Al 90+1, una falta de Jean Carlos Neto sobre Raigel Márquez generó el caos.
Muchos apreciaron que la falta se dio fuera del área grande. El video de la jugada, en efecto, muestra que así fue. Pero Perluzzo sentenció penal y entonces los aragüeños explotaron de rabia. Neto recibió tarjeta amarilla por la infracción y el portero Carlos Salazar vio otra por reclamo. Antes de que Evelio Hernández empatara el juego con su cobro efectivo, Wuiswell Isea fue expulsado por otro reclamo.
Apenas habían transcurrido cuatro minutos de descuento para ese momento. Y el cuerpo arbitral decidió mostrar otro cartel con dos minutos más, que sumados a los seis iniciales, prolongarían el juego hasta el minuto 90+8.
Con la pizarra 1-1 y un hombre menos, Aragua se disponía a defender el resultado y controlar su ira. Petare, por supuesto, tenía que intentar ganar en este último esfuerzo. Al 90+7, el portero Salazar demoró unos segundos en hacer un saque y Perluzzo le mostró la segunda amarilla.
Todavía quedaba capacidad de asombro en el Aragua y, vale decirlo, en el resto de los presentes.
Salazar se fue pateando un balón a la tribuna y el volante Miguel Mea Vitali se convirtió por segunda vez en su carrera en guardameta de emergencia (lo hizo antes en el Maracaibo) al 90+9. Todos suponían que solo tendría que estar allí 60 segundos. Estuvo 7 minutos y tuvo que soportar la avalancha final del Petare, con todo y un tiro libre cercano de Evelio Hernández que, para su fortuna, se fue alto.
Cuando al minuto 90+16, Perluzzo finalmente decidió acabar con este increíble partido, el insulto que profirió Cavalleri se convirtió en un coro repetido por jugadores y directivos del Aragua.
En el experimentado técnico argentino, después de tantos años en esta labor, todavía quedaba también la posibilidad de ser sorprendido: “Yo soy un técnico producto del fútbol venezolano, entonces he visto muchísimas cosas acá. Pero antes de retirarme, tengo ganas de no ver tantas cosas, fueron demasiadas ya”.

Miguel Mea Vitali: "¿16 minutos?"

El capitán del Aragua, Miguel Mea Vitali, acompañó a su técnico en el reclamo. "Es lamentable lo de hoy. Dentro del campo vi que la falta del penal fue fuera del área. No sé cuántos minutos adicionales dieron, 10 o más. Fue demasiado", dijo. Al saber la cantidad exacta, exclamó: "¿16 minutos? Eso habla por sí solo. Pero no comentaré de los árbitros, porque son capaces de suspenderme por hablar aquí con los medios".

Raúl Cavalleri: "Es un bochorno"

El técnico de Aragua dijo al concluir: "Es un bochorno, es un saqueo a tres puntos, a la esperanza de un equipo como Aragua. Es un saqueo al esfuerzo que hizo el conjunto. Este es un fútbol que está creciendo en cuanto al nivel de los jugadores, pero que está dando un paso atrás con arbitrajes como éste".

Ficha técnica:

Petare (1):
Liebeskind; Villarroel*, Sánchez, Maidana, Lobo; Di Julio (R.Márquez, m.76), Giroletti; Hernández, Salcedo (Cásseres, m.55); Guazá (Córdoba, m.62) y Arévalo. DT: Eduardo Saragó.
Aragua (1):
Salazar; Fajardo (Montanari, m.45), Amara, Neto, Agnello; M.Mea Vitali, Peraza*; Villarreal (Lugo*, m.56), Isea; Etchemaite (Palomino, m.61) y Rondón. DT: Raúl Cavalleri.

Goles: 0-1, m.66, Rondón (A) –tomó la pelota fuera del área, pasó a un defensa y definió frente al portero-; 1-1, m.90+4, Hernández (P) –tiro penal al medio-.
Amonestados: Lobo (P); Fajardo, Etchemaite, Peraza, Rondón, Neto, Salazar 2.
Expulsados: Isea (A) –m.90+3-; Salazar (A) –m.90+7-.
Árbitro: Giancarlo Perluzzo (Monagas).
Estadio: Olímpico, Caracas. *Juvenil.
(Nota escrita para la edición 24/2 de El Nacional)

miércoles, 23 de febrero de 2011

Ronald Vargas: "Roberto me visitó y hasta jugamos Play Station"


Romper la rutina es algo que agradece en estos momentos Ronald Vargas, mientras debe estar de reposo en su casa en Bélgica, luego de su operación de rodilla. Hace más de una semana, apenas un día después de volver a su casa después de ser dado de alta en la clínica, Juan Arango se trasladó desde Alemania y pasó a verlo.
Este lunes, el visitante fue nada menos que su mejor amigo, Roberto Rosales, que juega en el Twente de Holanda. “Sí, estuvo aquí en mi casa. Roberto es como mi hermano y, por supuesto, que haya venido me motiva mucho. Me alegra ese gesto de verdad. Igual Arango, que vino el domingo anterior, cuando recién estaba operado”, dijo Vargas desde Bélgica.
Rosales ha compartido con el enganche del Brujas en el Caracas y la selección nacional. Al salir al exterior, pudieron mantener el contacto, pues se visitaban con mucha frecuencia en Bélgica, cuando el lateral derecho jugó con el Gante. A pesar de su mudanza a Holanda, la amistad se mantiene, como lo evidencia esta visita. “Estuvimos hablando de todo un poco y hasta nos pusimos a jugar con Play Station”, contó Vargas sobre el encuentro.
Aunque todavía le queda mucho por hacer en su proceso de recuperación, el guatireño se nota más animado. “Me siento mejor, gracias a Dios. Cada día voy mejorando y ya tengo menos dolor”, afirmó.
Su reposo actual lo toma con calma. La orden es permanecer acostado, y su pierna debe recibir masajes y tratamiento. “No puedo caminar aún, apenas apoyarme con muletas nada más. El fisioterapeuta viene todos los días a la casa”, detalló.
El próximo paso es el chequeo médico con Geert Declercq, el cirujano que intervino su rodilla izquierda. “El viernes me toca chequeo con el doctor, y entonces el lunes debo conocer ya mi cronograma para el trabajo que tengo que hacer (en la rehabilitación)”, dijo el jugador vinotinto.
Vargas pasó el trago amargo de esta grave lesión y de saber que tendrá que esperar al menos seis meses. Por ahora, se reanima para volver con fuerza para la próxima temporada, y con visitas como las de su “hermano” Rosales, la espera se hace más llevadera.
(Nota escrita para la edición 23/2 de El Nacional) 

domingo, 20 de febrero de 2011

La bicicleta de Ronaldo aún aguantaba el peso

Si hay un jugador que puede ofrecer una gran variedad de goles en su carrera para que alguien pueda escoger su favorito, ese es Ronaldo. Para quien escribe, el gol que quedará en la memoria no será necesariamente el mejor, categoría en la cual quizás reine el tanto que le anotó al Compostela cuando era la estrella del Barcelona en 1996. Tampoco será el que le trajo la mayor alegría, renglón en el que pueden competir los dos tantos a Alemania en la final de Corea-Japón 2002.
El que quedará en la memoria personal es uno que Ronaldo marcó cuando no estaba en su mejor momento, justo en la época en la que las bromas acerca de su sobrepeso eran continuas. Puede ser por varias razones. Por significado histórico, asombro y, por supuesto, cierta nostalgia.
Fue en Dortmund, el 27 de junio de 2006, en Alemania. No tener a Venezuela en el Mundial obliga a tener una agenda abierta a una variedad de partidos para escoger cuáles pueden resultar interesantes para cubrir, aunque también se deben tomar en cuenta consideraciones logísticas y de distancia en la elección, a menos que posea un helicóptero como el que Franz Beckenbauer usó durante ese torneo para llegar a cualquier ciudad, día tras día, para asistir al juego seleccionado.
Esta escogencia en particular fue acertada. Era el encuentro de octavos de final en el impresionante Westfalenstadion. Brasil había cumplido su tarea como líder de su llave, a pesar de un comienzo flojo y decepcionante para el combinado considerado el gran favorito del momento. No obstante, este Brasil del “cuadrado mágico” al menos había dejado una buena sensación en su último encuentro contra Japón, también allí en Dortmund.
En aquel juego contra los nipones, Ronaldo había despertado con dos goles: un cabezazo y un tiro colocado que lo llevaron de inmediato a compartir el tope de la lista de anotadores en Mundiales de todos los tiempos con Gerd Müller, con 14 tantos.
Hasta ese momento, parecía algo especial haber podido presenciar tal hecho histórico, en caso de que “el gordito” no diera más. Pero de inmediato llegó este “bonus track”. Ese 27 de junio, el rival también era una opción atractiva para estar en ese juego. Era la sorprendente Ghana, que además tenía al único venezolano en un cuerpo técnico mundialista hasta ahora: Alí Cañas, asistente de Ratomir Dujkovic.
A los 5 minutos, Ronaldo resumió en un par de movimientos toda su carrera. Ya había recibido el pase al vacío y encaraba al portero. Entonces hizo la bicicleta que todos sus contrarios conocían, temían y maldecían luego de ser engañados. De nuevo: un amago con la pierna derecha por encima del balón, mismo movimiento con la izquierda, pero esta vez sí se lleva a pasear a la pelota para aquel lado. Con el portero en el piso, Ronaldo solo tuvo que terminar de empujar el balón para dejar su huella en la historia: 15 goles en Mundiales.
Ya era gordito, pero hipotiroidismo o no, seguía siendo Ronaldo. El que miles de veces hizo esa bicicleta, el que en cientos de ocasiones celebró un gol. Y fue especial verlo y ahora recordarlo.
Esta semana, su retiro estremeció al mundo, no por inesperado o triste, sino porque provocó esa sensación en todos aquellos que lo admiraron y lo consideraron el mejor jugador del mundo durante muchos años, y probablemente el más grande centro delantero de la historia, con el perdón de Marco Van Basten, Müller y otros más.
Su anuncio final removió la memoria, de ahí la intención de dedicar la columna, no a comparaciones o explicaciones, sino a compartir un recuerdo. Con toda seguridad, usted también tiene el suyo.
(Columna escrita para la edición 20/2 de El Nacional)

martes, 15 de febrero de 2011

Las cifras de un proyecto interminable: el Centro de Alto Rendimiento

Ignacio Sanglade, tesorero de la FVF, declaró en una entrevista que publiqué en El Nacional que el costo del Centro de Alto Rendimiento era de 30 millones de Bs. F., cifra que coincidía con los 8 millones de dólares que dijo el DT nacional, César Farías, que sumaba la obra. Ayer, la cifra en bolívares bajó a la mitad: 15 millones. Tal inconsistencia sólo justifica las dudas sobre este interminable proyecto. La excusa de la falta de pago de PDVSA no sirve. Sanglade y Esquivel admiten que recibieron de PDVSA la mitad de sus 7 millones de Bs.F. Comparado con los 30 del total, es poco. Si ahora resulta que el total es 15 es peor: ¿donde están los 250 mil dólares que cada año desde 2003 ha entregado FIFA por el Programa de Ayuda Financiera y de los cuales han destinado, según FIFA, 81 por ciento al CAR? Otra cifra: 60 % de avance. Si tomó 10 años llegar allí con 30 millones (o 15), ¿cuánto falta para terminar el 40 %? Más dinero dijeron: 18 millones de Bs. F. Sanglade lo había calculado en 4 millones de dólares, de los cuales Esquivel dijo que tendrán sólo 400 mil del programa Goal. Según estos cálculos, ¿cuántos años más habrá qué esperar para ver el CAR finalizado?
(Columna escrita para la edición 15/2 de El Nacional)

lunes, 14 de febrero de 2011

Miku: "Estoy muy contento por ser parte de la historia junto a Salomón"


Salomón Rondón y Miku pueden formar una sociedad que le traiga muchas alegrías a Venezuela. Lo han empezado a hacer como dupla de ataque en la selección y ayer, en la liga española, se unieron para escribir un capítulo inédito.
Fue la primera vez que dos jugadores que representan a la Vinotinto se enfrentaron en la primera división de España, y no quisieron dejar la anécdota allí. Miku marcó al minuto 8 el 1-0 para el Getafe y Rondón cerró el encuentro con el gol del empate 2-2 para Málaga al 90+5 para marcar también la primera ocasión que dos venezolanos anotan en un mismo choque de ese circuito.
“Estoy muy contento por ser parte de la historia junto a Salomón”, afirmó Miku desde España, a través de su representante de prensa. “Después del partido hablamos e intercambiamos camisetas”, dejó saber el atacante del Getafe, que llegó a 6 goles en la liga por 8 de Rondón. Ambos se acercan al tope establecido por Juan Arango en la campaña 2007-08 con 12 goles.
Antes del encuentro, Salomón Rondón había bromeado con que le desearía mala suerte a Miku, porque el Málaga necesitaba con mayor urgencia los tres puntos. Pero su compañero de selección tuvo todo lo contrario en su jugada de gol, apenas en el inicio del juego, cuando un centro que no pudo despejar bien el portero Arnau le rebotó en el cuerpo y entró al arco. “Son las jugadas en las que hay que estar atento y buscar la pelota”, expresó Fedor.
Luego fue Adrián Colunga, convertido ahora en socio de Miku, quien colocó el 2-0 que parecía encaminar la victoria visitante en La Rosaleda.
“La asociación con Colunga está resultando muy bien, nos sentimos cómodos jugando juntos arriba y lo más importante es que estamos haciendo goles los dos”, dijo Miku.
Pero en el segundo tiempo, Getafe se confió y no logró liquidar el encuentro. Un tiro penal de Julio Baptista colocó el descuento 2-1 y entonces Salomón Rondón pasó a ser el centro de atención. Tuvo un par de ocasiones para igualar, la más clara al minuto 86 cuando remató alto un buen centro al corazón del área, pero el goleador no se desesperó.
En el último minuto del descuento, Sebastián Fernández bajó un centro con el pecho para darle una asistencia perfecta a Rondón, que colocó su corto disparo pegado al poste izquierdo para desatar la celebración del Málaga.
Su alegría contrastó con la rabia de su amigo. “Terminé algo molesto porque teníamos los tres puntos en el bolsillo y se nos escaparon por no saber cerrar el partido”, dijo Miku.
Una vez concluido todo, el encuentro entre los dos venezolanos y esas camisetas que se entregaron fueron la mejor forma de recordar que sí hubo un ganador en el partido: Venezuela.
(Nota escrita para la edición 14/2 de El Nacional)

Mönchengladbach despidió al DT que tenía marginado a Juan Arango


La crisis que vive el Borussia Mönchengladbach llevó a la directiva del equipo a tomar una decisión que había demorado demasiado, pues el conjunto marcha directo al descenso. Ayer, el técnico Michael Frontzeck fue despedido y esa decisión podría tener un efecto inmediato en la difícil situación que vive Juan Arango.
El maracayero perdió la titularidad en los últimos cinco encuentros y no fue convocado al regresar a Alemania, luego de jugar con la selección. “Es difícil, el entrenador lo decidió así, me tocó a mí pasar a ser suplente y lo acepto. Es algo que nunca me había pasado, pero me toca trabajar, practicar fuerte y esperar mi oportunidad otra vez”, confesó con pesar Arango cuando vino al país esta semana.
Esa oportunidad, curiosamente, llega con este cambio en el timón del Gladbach. No es garantía que un nuevo técnico llegue a devolverle la titularidad, pero al menos podrá hacer cambiar de opinión al que llegue, pues Frontzeck ya no contaba para nada con el zurdo. Por el momento, Sven Demandt, técnico de las inferiores del club, será entrenador interino.
Arango necesita tener minutos y continuidad desde hoy hasta mayo para poder llegar en buenas condiciones a la Copa América en Argentina con la selección. En Puerto La Cruz demostró que la inactividad del último mes no lo afectó en demasía, pero será difícil sostener esa condición por casi cuatro meses más.

Cambio de aires. Al Gladbach le costará salvar la categoría. Perdió contra Stuttgart y St.Pauli, dos rivales directos por la salvación, y está siete puntos por debajo del Kaiserslautern, el conjunto que hoy tendría que jugar los playoffs de relegación.
Arango manifestó en Maiquetía que con seguridad saldrá del equipo si eso sucede, amparado en su cláusula de contrato: “Es cierto que tengo una cláusula en el contrato, y si el equipo baja no estaría con ellos”.
En junio, con 31 años de edad, Arango todavía podría optar por otro fichaje en un buen equipo en Europa. Volver a España ha sido su idea, y no lo ocultó al venir al país, aunque tampoco descartaría otro destino. “A España puedo volver porque es un fútbol que me abrió las puertas y en el que me fue bastante bien. Pero en el fútbol pasan muchas cosas, puede ser España como puede ser también otro sitio. No se sabe, sólo hasta que termine la temporada se sabrá".
(Nota escrita para la edición 14/2 de El Nacional)