Ronald Vargas se encuentra en Bélgica, pero la relación con el Brujas ha quedado ya en un punto muerto. Su agente, Dirk De Vriese, afirmó a la prensa belga que no habrá negociación para la renovación con el equipo y por eso no se sentaron a conversar con el gerente del Brujas, Vincent Mannaert.
Para el guatireño, esta situación ha sido muy incómoda. En el breve contacto que estableció ayer desde Bélgica, sólo expresó su deseo de encontrar una definición pronto.
“Estamos en eso. Creo que mañana (hoy) hablaré en conferencia de prensa. En la semana se debe solucionar esto y sabré qué haré por fin”, afirmó desde Brujas.
De Vriese dejó las reglas claras para los próximos días. “Lo único que queremos saber del Brujas es cuál será el monto de su transferencia. O lo dejan ir al Anderlecht por 2,5 millones de euros o terminará saliendo al extranjero por mucho menos dinero”, afirmó el representante.
De Vriese espera hacer valer una salida legal, según la cual Vargas puede dejar al Brujas por un monto cercano a 270 mil euros, y firmar con algún equipo fuera de Bélgica. Sporting, Benfica y PSV han mostrado interés, aunque Brujas asegura que aún no reciben ninguna oferta concreta por el enganche.
A Vargas le ha preocupado la reacción de la afición, en especial porque el principal interesado en él es un gran rival: Anderlecht. Por eso, en sus únicas declaraciones a la prensa belga al volver, dijo: “La incertidumbre me pesa, porque el problema es que los aficionados no entienden toda la situación, no saben todo lo que ha pasado”.
Sobre su estado físico, afirmó: “Todavía me quedan tres meses de rehabilitación”.
(Nota escrita para la edición 19/6 de El Nacional)