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Ha sido un camino para aquellos jugadores que desde temprano entendieron que su futuro tenía mayor sentido con una pizarra (como le ocurrió a César Farías y a Eduardo Saragó) y también para esos jugadores estelares que descubrieron que podían tener tanto o más éxito en ese nuevo rol (como Carlos Maldonado y Noel Sanvicente, entre otros).
Siempre ha sido una alternativa, pero la mejor preparación de los jugadores en la actualidad y el atractivo que presenta la nueva ruta a tomar, a pesar de los problemas siempre presentes del campeonato nacional, invita a aumentar el número. Lo que no cambia, según la opinión de varios entrenadores consultados, es el perfil que debe tener aquel jugador que decida empezar a dar órdenes.
Ves ese posible futuro en jugadores que valoran lo colectivo, no sólo lo individual. Notas un liderazgo que delega, que se preocupa por el bien general, no sólo el propio. Además, ese tipo de jugadores no son líderes de una línea nada más y tienen el carisma necesario, conducen al bien, tienden a unificar", afirmó Chuy Vera, técnico de Estudiantes.
"La gente tiene la concepción errónea de que un buen jugador debe ser un buen técnico. No necesariamente. Lo principal es que tiene que saber leer los partidos, manifestar conocimiento del rival que va a enfrentar, ser respetuoso con sus compañeros, con los rivales, con los dirigentes, aunque tenga temperamento, pero lo que no puede ser es volado", dijo Manuel Plasencia, estratega del Petare.
Para Vera, la habilidad para manejar la adversidad es esencial en ese futuro entrenador: "Más allá de los errores que cometas, el éxito de un entrenador se basará en buscar lo positivo en esos errores. Ahí notas si pueden ser técnicos, si saben canalizar las cosas".
Para Plasencia, la personalidad es importante: "Debe tener cualidades humanas, suficiente autoridad moral. La mayoría no habla tanto, son comedidos en lo que dicen. Ahora, si encima de eso jugaban bien, es un agregado para su experiencia".
La interacción entre esos jugadores aspirantes y sus técnicos se produce de forma natural, bien sea que ya esté formada en su mente la idea de ser entrenador al retirarse o simplemente porque su curiosidad y sus cualidades lo llevan a querer absorber esos conocimientos. "Con ese tipo de jugadores se da una comunicación natural y mutua. Ellos buscan ese contacto porque les nace también. Y no es que sea vea mal que el entrenador se la pase hablando con un jugador, es que sucede en los equipos. El técnico los ve como un apoyo, son una extensión en el campo", explicó Vera.
Raúl Cavalleri, técnico del Aragua, agregó una advertencia debido a la tendencia que observa en el presente: "No sé si necesariamente deban ser asistentes técnicos primero, antes de tomar un equipo, pero sí creo que deben cumplir un paso antes. Carlos Maldonado fue mi asistente, por ejemplo, y creo que todos deben pasar por la previa. Lo recomiendo, es como en cualquier otra profesión, deben empezar por algún paso intermedio, de lo contrario es un cambio de profesión muy rápido. Yo entrené en colegios primero, imagínate".
Candidatos a granel. Entre los jugadores activos hay varios que ya han confesado que desean ser técnicos una vez se hayan retirado, entre ellos jugadores de la talla de Luis "Pájaro" Vera y José Manuel Rey. Pero resulta interesante también conocer quiénes son candidatos a asumir ese rol por sus cualidades, bien sea que lo hayan decidido o aún no hayan manifestado ese deseo.
"Gabriel Urdaneta siempre fue un líder dentro de la cancha, un líder de grupo. Creo que va a ser un muy buen técnico y se está preparando para eso", comenzó Vera el conteo. "Leo Vielma también es muy intuitivo, tiene una excelente lectura del juego. Otros dos que podría mencionar son Vicente Suanno y Elvis Martínez", agregó Chuy.
"Hay muchos, muchísimos. En los equipos que he dirigido he podido ver a varios con las cualidades que se requiere. Te digo, eso se nota desde temprano. Con Vicente Rosales lo vi. Noel Sanvicente, desde que era jugador, sabías que iba a ser técnico; Osnel García también", aseguró Plasencia.
"De los que están activos ahora, te puedo mencionar a Alain Giroletti y Wuiswell Isea, van a ser técnicos y muy buenos. Luis Vallenilla Pacheco, aunque lo dirigí por poco tiempo, también va ser entrenador. Y Edder Farías, sé que es muy joven y quizás ni ha pensado en eso, pero estoy seguro de que si se dedica a ser técnico, lo hará muy bien".
Una camada nueva y mayor cada vez. Otro de los factores que debe seguir impulsando el cambio en el fútbol venezolano.
(Nota escrita para la edición 8/4 de El Nacional)
