martes, 31 de agosto de 2010

Juan Arango se ilusiona con más goles, tras terminar su sequía

Desde Frankfurt, Juan Arango llega a Maiquetía acompañado por Roberto Rosales, Tomás Rincón y Ronald Vargas. Concede a los jóvenes el turno de hablar primero con la prensa, y luego atiende con amabilidad.
No exagera sus gestos al describir su alegría por anotar en la Bundesliga después de 11 meses, ni se molesta demasiado con una pregunta sobre Fernando Amorebieta.

“Me alegra haber hecho el gol con el Gladbach y me motiva, pero tampoco estaba tan desesperado, porque aunque he anotado mucho en otros clubes y con la selección, nunca he sido un goleador. No soy un delantero que viva de los goles, sino que me caracterizo por hacer pases para gol y en eso he tenido éxito en Alemania”, dijo Arango.

De todas maneras, su festejo fue más emocional de lo usual: “Festejé así, porque obviamente tenía mucho tiempo sin marcar, y también por el partido tan completo que estábamos haciendo ante un gran rival. Por eso merecía una celebración así”.

Arango dejó atrás la sequía con un espectacular tiro libre, una de sus armas preferidas: “El año pasado no tuve tantas oportunidades de patear. Y en esta campaña había tenido mala suerte, o pegaba en el palo o la sacaba el arquero. Pero ya en la pretemporada marqué y ahora tengo otro. Esperemos que vengan más”.

Confiado
Arango reveló que escogió ubicarse como volante izquierdo en el esquema 4-3-3 del DT César Farías: “Hablé con él y se lo dije. Me siento mucho mejor ahí, porque no soy un jugador de agarrar la pelota y encarar, de velocidad, que es lo que necesita como extremo en ese esquema. En la primera línea tengo más la pelota, puedo llegar de frente al área, algo que no hago tanto si estoy en la banda. Contra Panamá tuve cuatro o cinco disparos”.

El zurdo agregó que no le molesta el sacrificio defensivo. “Porque en el Gladbach, como volante izquierdo, igual debo recorrer muchos metros y ayudar al lateral. Con ubicación y experiencia, también compenso”, dijo.

Como capitán, Arango tiene su opinión sobre el caso del vasco-venezolano, aunque quiso moderarla: “No quiero entrar en polémicas, pero si él no quiso venir, se lo pierde. Querrá esperar su oportunidad con la selección española, aunque lo veo difícil. Es un gran defensa, aquí podía tener la oportunidad de mostrarse”.


Escucha a Arango hablar del gol, del Gladbach y sobre Amorebieta:



Aquí habla de la selección y su ubicación en el 4-3-3:

Rosales se adapta al Twente con ayuda de amigos

Después de su primer partido de liga como titular del Twente, una goleada 4-0 sobre el Utrecht, Roberto Rosales puede empezar a sentirse parte importante de su nuevo club. Sin embargo, en esta transición del fútbol belga al holandés, el venezolano ha tenido ayuda de dos viejos conocidos de su antiguo equipo, el Gante: el técnico Michel Preudhomme y el goleador Bryan Ruiz.

El diario De Telegraaf publicó una nota sobre Rosales, en la que destaca la relación que tiene con ellos. Sobre Preudhomme reseña la confianza que tiene en el talento del caraqueño, a pesar de saber que todavía debe alcanzar su tope, pues apenas empieza su campaña con un nuevo conjunto.

Con el costarricense Ruiz, la estrella del campeón holandés, la relación es más estrecha aún. El goleador, que decidió permanecer en el Twente, le sirve de socio en el campo y fuera del mismo.

“Nos conocemos muy bien y en el campo nos encontramos con facilidad”, comentó Rosales a ese diario sobre su trabajo con Ruiz. De su época en el modesto club belga, pasaron ahora a una situación mucho más favorable. “Es extraordinario que ahora podamos jugar juntos partidos de Liga de Campeones”, comentó el venezolano.

Fuera del terreno, Ruiz también ayuda a Rosales a adaptarse a su nueva vida en Enschede. “Mientras espero a que me den mi apartamento, estoy viviendo en casa de Bryan. Es mucho mejor que estar en un hotel”, contó Rosales.

Escucha más en la entrevista con Rosales aquí:

Josmar Zambrano va tras las huellas de Miku y Salomón Rondón

A Miku Fedor le tomó casi seis años lograrlo. Salomón Rondón lo hizo después de dos. Dar el salto de la segunda división española a la Liga de las Estrellas es el paso con el que sueña Josmar Zambrano, para poder imitar a estas dos referencias.
Pero no se apura. Apenas tiene 18 años de edad y acaba de firmar su primer contrato profesional por cinco años con el Tenerife, la institución que se ha encargado de desarrollar su talento desde hace año y medio.

“Estoy contento, muy alegre. Es muy grande saber que cuentan así conmigo y que voy a tener oportunidades en el equipo. Debo trabajar más fuerte para asegurar un cupo en el primer plantel”, afirmó Zambrano desde España.

La prensa española lo catalogó como la gran promesa de la cantera del Tenerife. En Cataluña reseñaron el interés del Barcelona por el venezolano. Pero Zambrano no se distrajo y aseguró una opción que le agrada mucho: “Me enteré por la prensa y por comentarios sobre ese interés de Barcelona, pero en realidad estoy muy bien aquí en Tenerife, me siento cómodo y creo que puedo tener buen futuro en este conjunto”.

Tenerife no fue un destino totalmente casual para Josmar. Su madre se había ido a vivir allí, y la firma del jugador produjo el reencuentro familiar luego de tres años de separación. “Poder estar aquí con mi mamá fue lo mejor. Además, me he adaptado muy bien a la ciudad, hay muchos venezolanos”, contó.

El camino a seguir
Primero debe caminar antes de correr, y esta temporada probablemente la pase entre el Tenerife B de la tercera división y las oportunidades ocasionales que le brinden en el primer plantel del club, en la división de plata.

“Por ahora, esa es mi prioridad, ganarme un puesto en segunda división. Hay muy buen plantel como para subir a primera otra vez. Me gustaría llegar allí también, pero voy paso a paso”, sostuvo.

Obviamente, admira lo conseguido por Miku y Rondón. “Los he seguido desde que estoy aquí, aunque no los conozco aún. Son ejemplo y quisiera dar ese salto también algún día”, comentó Zambrano, quien se diferencia de ellos en su físico (Josmar mide 1,64 metros de estatura) y sus características de juego.

“Ellos son delanteros ‘9’. Yo, en cambio, juego también como mediapunta, es lo que más hago, y también puedo llegar por las bandas”, dijo.

Los amigos de la Sub 17

En 2009, el Suramericano Sub 17 no fue la más grata experiencia para Venezuela. Pero esa generación dejó talentos que ya han dado muestras de lo que puede ser un gran futuro.

En el Caracas lo han hecho Alexander González, Rómulo Otero, Carlos Suárez, Fernando Aristeguieta, y ahora surge Josef Martínez. En el Táchira, se han mostrado Jackson Clavijo y Laudemir Valera. Y en España, Zambrano acumula méritos para pasar pronto al frente de la clase.

“Con todos los de ese grupo del Suramericano Sub 17 me llevé bien, mantengo el contacto con algunos de vez en cuando. Con el que más hablo es con Laudemir (Valera), porque los dos somos tachirenses”, expresó.

Con Aristeguieta (la otra gran promesa de ese grupo), tiene pendiente una charla: “No he hablado recientemente con él, pero me gustaría conversar un día, porque supe de su lesión. Es una lástima que pase un tiempo fuera de las canchas, así que sería bueno darle ánimo”.

Táchira y la selección
Zambrano contó la historia de su coqueteo con el equipo de sus amores: Táchira. “Yo comencé en el club Monseñor Arias Blanco, donde estuve hasta los 14 años. Luego fui a Lotería del Táchira y jugué la serie nacional Sub 17. Y entonces fui a probar con el Deportivo Táchira en una pretemporada, pero justo surgió la posibilidad de venir a Tenerife y lo hice”, relató.

“Desde pequeño sigo a Táchira, y aquí siempre estoy pendiente de sus resultados. Además, tengo a amigos allí. Sería muy bonito poder jugar algún día con el equipo”, afirmó.

Con el otro equipo que desea estar es con la siguiente categoría de la selección venezolana, la Sub 20. Ese es un sueño que se puede cumplir pronto: “Es una ilusión poder volver a estar en la Vinotinto. Quisiera jugar con la Sub 20 el Suramericano y buscar la clasificación al Mundial. Ojalá luego pueda estar en la mayor en algún momento”.

Con el talento que le reconoce la prensa y la ética de trabajo que destacan quienes lo conocen, este pequeño jugador puede seguir soñando en grande.

Con ganas de trabajar

Tener la cabeza bien puesta, para decirlo de forma coloquial, es un requisito que no siempre se exige de un jugador, y en el caso de Zambrano resulta una fortaleza.

“Es el muchacho más trabajador que conozco”, destacó su agente Donaldo Barros. Por eso no impresiona que el jovencito conozca hasta los detalles de su contrato. “Mi cláusula de rescisión subió de 6 a 12 millones de euros de forma automática, porque así había quedado establecido en mi contrato anterior. Si pasaba a ser profesional, aumentaba”, explicó Zambrano con claridad de criterio.

Tampoco extraña que haya estado de acuerdo con su agente en no dejarse llevar por los comentarios del interés de grandes clubes en él. “Esos rumores hay que tomarlos con cuidado. Analizamos con él la situación y lo mejor es que esté en un club que le permita desarrollarse, donde de verdad pueda surgir. Aquí lo han tratado muy bien, porque además es extracomunitario”, expresó Barros.

Noel Sanvicente disfruta su nueva vida en el Real Esppor

Sus gritos en la cancha artificial de La Guacamaya se escuchan tan nítidos como ocurría en Cocodrilos. Pero ya Noel Sanvicente se ha acostumbrado tanto a su rutina con el Real Esppor, que no hay espacio para la nostalgia de su pasado caraquista. Ni siquiera en la rutina de celebrar triunfos, porque de inmediato ha empezado a conseguirlos también con su nueva institución.

“Cambia la rutina, el sitio, pero el trabajo es el mismo. Acá me han dado todo, me han hecho sentir en casa. Si bien faltan cosas, con Caracas a veces también faltaban, y en cuanto a mudarme de canchas para entrenar, también lo viví con Caracas mucho tiempo (antes de establecerse en Cocodrilos), así que no me complico ni es una sorpresa, ya me ha tocado hacerlo”, comentó el DT al iniciar la charla.

Al técnico que empató el registro de más estrellas locales (cinco) y la mejor figuración en Copa Libertadores (cuartos de final) sería difícil exigirle más en esta liga, tras dejar al equipo más ganador del país. ¿Cuál sería su nuevo reto? ¿Lograr pronto títulos con esta novel institución?
“Mi reto es pasar y dejar algo acá, una huella. Pero no creo que tenga que probar nada. En el Caracas gané con chamos, con estrellas, pero todo eso fue parte del trabajo que me tocó. Para ser campeón dependes de los jugadores, y este es un equipo competitivo, puede ganar el título, pero no me lo impongo como un reto. Salir al exterior sí es una meta para mí. Acá lo que espero es que la institución y el fútbol en general crezca”, respondió.

El 14 de noviembre enfrentará al Caracas, pero “Chita” niega que haya marcado la fecha: “Contra Caracas será igual, quizás para los que estén fuera del campo sea diferente, pero no cambia la importancia. Prefiero perder con Caracas y ser campeón. Habrá sentimientos encontrados, seguro, por la fanaticada, los jugadores. Saludaré, pero luego de eso será el mismo trabajo de siempre”.

En el Esppor, ya se siente como en casa. “Estoy cómodo, contentísimo con la gente que tengo alrededor. Los resultados ayudan, pero cuando te sientes a gusto con el trabajo tienes lo principal. Falta todavía, empezamos temprano la pretemporada porque consideré necesario dar ese mensaje, pero aún los muchachos están agarrando la idea. Vamos bien”, dijo.

Luis Manuel Seijas: "Mi familia me podrá ver en Caracas"

Uno de los verdugos del Lara en la Copa Sudamericana fue precisamente un venezolano. Luis Manuel Seijas destacó en la goleada 4-0 del Santa Fe, que le permitió sellar en Bogotá su avance en el torneo continental y decretar al mismo tiempo la eliminación del cuadro crepuscular.

“Me fue bien y en general hicimos un buen partido, pudimos remontar la diferencia (Lara había ganado la ida 2-0). Sabíamos que a ellos les iba a costar la altura de Bogotá y lo aprovechamos”, afirmó Seijas, vía telefónica desde Colombia.

Ahora el volante se enfrentará a otro cuadro de su país, Caracas, precisamente la institución de la cual salió al exterior por primera vez. “Pero viviré ese partido igual que otros. Al Caracas le debo muchas cosas y por eso les estoy agradecido, pero me debo al Santa Fe. Lo mejor será poder volver a Caracas y tener a mi familia en el estadio”, comentó el valenciano, sobre la serie que cambió de fecha y ahora se jugará el 16 y el 23 de septiembre.

Seijas, ex jugador del Táchira, admite que su corazón es aurinegro, pero que eso no será aliciente ante Caracas. En Bogotá, precisamente en el juego ante Lara, estuvo un directivo tachirense, pero no se reanudaron conversaciones para su posible regreso a San Cristóbal. “Sé que Edmundo (Kabchi) vino, porque me mandó un mensaje, pero el partido terminó tarde y no nos pudimos ver. Sé que algún día volveré a Táchira, pero no por ahora. Fue grande el esfuerzo que hicieron para llevarme, pero lamentablemente no se pudo”, dijo el zurdo.

Antes de enfrentar a Caracas, Seijas tendrá otro viaje de retorno al país para enfrentar a Colombia y Ecuador, el 3 y 7 de septiembre. “Estoy muy feliz por la convocatoria de la selección. El partido contra Colombia será especial para mí”, finalizó.